Un book de fotos profesional es una inversión importante en tu imagen, por lo que prepararte adecuadamente marcará la diferencia en el resultado. No se trata solo de presentarte el día de la sesión, sino de llegar con todo listo: la ropa adecuada, el look pensado y la mejor disposición. Una buena preparación previa te permitirá aprovechar al máximo la sesión de fotos y lograr imágenes que realmente destaquen en tu portafolio. A continuación, te guiamos a través de tres aspectos clave —vestuario, maquillaje y actitud— que debes cuidar antes de tu sesión de book fotográfico.
Vestuario: planifica tus conjuntos con antelación
El vestuario es uno de los pilares de un buen book. Elegir la ropa correcta garantizará que tus fotos tengan variedad y que cada look resalte tus cualidades. Lo primero es coordinar con tu fotógrafo o estilista (si cuentas con uno) qué tipo de atuendos van mejor con el estilo de sesión que han planificado. Por ejemplo, no es lo mismo un book orientado a moda urbana que uno más clásico o uno enfocado en fitness. Aun así, hay reglas generales:
- Prepara al menos 3 o 4 cambios de ropa completos. Incluye diferentes estilos: uno casual (ej.: vaqueros y camiseta blanca básica), uno elegante/formal (ej.: traje sastre o vestido de cóctel) y otros que muestren tu versatilidad (ropa deportiva, lencería/bikini si aplica, o un look de tendencia actual).
- Elige prendas que te queden bien de talla y con las que te sientas cómodo/a. Evita ropa demasiado holgada que oculte tu figura por completo, o demasiado ajustada que te limite el movimiento.
- Colores y estampados: opta por colores sólidos y neutros para la mayoría de prendas, porque son atemporales y no distraen. Un toque de color vivo en algún conjunto puede dar variedad, pero evita estampados muy cargados o logos gigantes que resten protagonismo a ti. Lo importante es que tú seas el foco de la imagen, no tu camiseta.
- Asegúrate de que toda la ropa esté limpia y planchada. Lleva cada atuendo en perchas o doblado cuidadosamente para evitar arrugas o manchas indeseadas en las fotos.
- Accesorios: mantenlos mínimos y coherentes con cada look. Unos pendientes simples, un reloj o un collar delicado pueden complementar, pero no te recargues de joyas. Para los hombres, a veces un traje se realza con corbata, reloj elegante, etc., pero siempre que el estilo lo requiera.
Prendas y elementos recomendados para llevar
- Ropa interior color nude o sin costuras: indispensable para usar debajo de distintos atuendos sin que se transparente o marque. También, si harás tomas de lencería, lleva conjuntos bonitos y discretos (negro, blanco o nude suelen funcionar).
- Zapatos variados: calzado acorde a cada look (ej.: tacones para el vestido formal, zapatillas limpias para el look casual, zapatos de vestir para el traje, etc.). Los zapatos completan la estética, así que no los olvides. Límpialos antes de la sesión.
- Camisa/blusa blanca o negra básica: una prenda infaltable que suele fotografiar muy bien y destaca tu rostro. Funciona tanto para hombres como mujeres, ya sea camisa blanca clásica o una camiseta lisa bien entallada.
- Complementos de maquillaje o props personales: si tienes algo característico que quieras incluir (ej.: gafas si usas y quieres alguna foto con ellas, un instrumento si eres músico, etc.), consúltalo con el fotógrafo. A veces, un elemento personal puede dar juego en alguna toma y hacer tu book más único.
Maquillaje y peluquería: realza tu imagen sin exagerar
Un maquillaje adecuado y un peinado bien cuidado son esenciales para lucir profesional en las fotos. Si cuentas con un maquillador/peinador en la sesión, igualmente debes llegar con la «base» lista: rostro limpio, bien hidratado, cejas arregladas y sin vello facial no deseado (barba perfilada en el caso de los hombres, si se va a mantener). Si no habrá estilista profesional y debes encargarte tú mismo/a del maquillaje y pelo, planifica un look que favorezca tus rasgos sin alejarse de tu apariencia habitual.
Consejos de maquillaje:
- Menos es más (al principio): comienza la sesión con un maquillaje bastante natural. La idea es que las primeras tomas muestren una versión fresca de ti. Usa una base ligera que unifique el tono de piel, corrector en ojeras o imperfecciones, polvos para matificar brillo y un toque sutil de rubor. Enfatiza tus ojos ligeramente (máscara de pestañas, un delineado suave) y un labial neutro o simplemente bálsamo labial. Para los hombres, normalmente basta con eliminar brillos (polvos traslúcidos) y arreglar cejas/barba.
- Incrementa intensidad gradualmente: en una sesión larga de book, puedes variar el maquillaje. Por ejemplo, después de obtener tomas con look natural, podrías intensificar la mirada con sombras más oscuras o un labial rojo para un outfit elegante. Así logras fotos con estilos diferentes (natural vs. glamouroso) en una misma sesión. Pero evita cambios drásticos que te hagan lucir como otra persona.
- Productos de larga duración: usa maquillaje de buena calidad que aguante las luces y las horas de trabajo. Primer para que la base no se derrita, máscara de pestañas waterproof para evitar manchas, y lleva contigo un kit para retoques (polvos, labial, pañuelos absorbentes de grasa, fijador de cabello, etc.). Esto es crucial sobre todo si no tienes un maquillador dedicándose a retocarte.
- Uñas y detalles: no olvides arreglar tus uñas (manicura limpia, color neutro o transparente si se pintan, o sin pintar pero cuidadas). Son detalles que suman pulcritud. Lo mismo con el pelo: si lo tienes largo, llévalo desenredado y con el último corte o arreglo hecho pocos días antes, de manera que luzca saludable. Evita trasnochar o beber en exceso la víspera; te pasará factura en la piel y la energía.
En peluquería, lleva utensilios necesarios: peine, laca, gel o lo que uses habitualmente, por si debes retocar tu cabello entre looks. Si tienes el pelo muy rebelde y no habrá peluquero, considera hacer un peinado sencillo que se mantenga (por ejemplo, pelo liso bien peinado, ondas suaves definidas con fijador, o recogido básico en coleta) en lugar de un estilo complejo que pueda deshacerse.
Actitud y preparación previa: descansa, organízate y mantén la mente positiva
La actitud con la que llegues a tu sesión de fotos influirá enormemente en el desarrollo de la misma. Prepararte mental y físicamente te ayudará a estar confiado/a y relajado/a, lo que se reflejará en las imágenes. Aquí van algunos aspectos a tener en cuenta en los días y horas previas:
- Descansa la noche anterior: duerme bien para evitar ojeras y lucir fresco/a. Llegar cansado hará más difícil concentrarte y dar lo mejor de ti. La energía se nota en las fotos.
- Cuida tu cuerpo en las horas previas: come algo ligero pero energético antes de la sesión (no llegues con el estómago vacío, pero tampoco muy lleno). Mantente hidratado. Evita trasnochar o beber en exceso la víspera; te pasará factura en la piel y la energía.
- Llega con tiempo y bien organizado/a: planifica salir con antelación para estar puntual. Lleva una maleta o bolso donde tengas todo tu vestuario y accesorios ordenados. Si estás apurado o desorganizado al llegar, te generará estrés desde el inicio. En cambio, llegar con calma te permite familiarizarte con el estudio o locación y empezar con buen pie.
- Mentalidad abierta y positiva: ve con la disposición de colaborar y divertirte creando buenas fotos. Si algo te preocupa (sea una pose, o que un outfit no te convence), coméntalo previamente con el fotógrafo para aclarar ideas. Confía en el profesional con el que trabajas y mantén la mente abierta a sus sugerencias durante la sesión.
- Practica y visualiza: los días previos, no está de más ensayar frente al espejo algunas expresiones y poses que te gustaría hacer. Esto te dará seguridad. También puedes visualizar la sesión y el resultado que deseas: imagina cómo quieres verte en esas fotos, eso puede ayudarte a proyectar la actitud adecuada cuando estés frente a la cámara.
- Documentos y comunicación: ten anotado cualquier detalle logístico (dirección del estudio, hora, contacto del fotógrafo). Confirma uno o dos días antes la cita si no lo han hecho, para mostrar tu profesionalidad e ir más tranquilo sabiendo que todo sigue en pie.
En suma, una preparación integral abarca desde lo externo (vestuario impecable, maquillaje controlado) hasta lo interno (actitud y confianza). Como fotógrafa profesional en Valencia, he comprobado que quienes vienen bien preparados a su sesión de book logran resultados mucho más sólidos y variados. Dedica tiempo a estos preparativos y llegarás al día de la sesión listo/a para dar lo mejor. Tus futuras fotos —y posiblemente tu carrera— te lo agradecerán.